Utilidad VS Liquidez, ¿qué importa más?

Hoy en día, cada vez es más importante el cuidado del dinero que mueven las empresas, ya que debido al uso adecuado del mismo es que logran soportar los estragos de una crisis o, por el contrario, ser víctimas de las graves consecuencias de un mal momento económico.

Reza una premisa financiera lo siguiente: "Es más fácil que una empresa cierre por falta de liquidez que por falta de rentabilidad". Y esta premisa puede estar perfectamente ejemplificada en una empresa cuyas utilidades reflejadas en el Estado de Resultados o Estado de Pérdidas y Ganancias pueden ser muy grandes e incluso suponen un rendimiento o rentabilidad también amplio; sin embargo puede ser que dichas utilidades se encuentren cimentadas en ventas o ingresos a crédito, los cuales tardarán cierto tiempo en convertirse en efectivo, y por lo tanto las obligaciones financieras de la empresa en el corto plazo no forzosamente podrán ser cubiertas con dichas utilidades ya que aún no han sido realizadas, es decir convertidas en efectivo.

El buen uso de las cuentas por cobrar y por pagar aunados a una reserva conveniente de efectivo es lo que permite a las empresas continuar con sus operaciones y poder darle vuelta al dinero a través del ciclo de conversión del efectivo, además el uso de un buen margen en el capital de trabajo permitirá a las empresas la oportunidad de continuar en marcha, pero además de poder retomar las posibilidades de un financiamiento flexible y totalmente pagadero sin presiones y sobretodo sin urgencias.

Una de las herramientas más conocidas para realizar un buen análisis de la liquidez es a través del Estado de Flujo de Efectivo o Análisis del Flujo de Efectivo (Cash Flow). - Tema del que hablaremos en otra oportunidad - .